He encontrado este texto de San Agustín en un libro que me ha dado mi cura D. Antonio.
Se lo dedico a los que hace un tiempo se metían con San José, diciendo que Jesús no tenía su sangre, que no era el padre de Jesús, y dejándolo por los suelos.
Estaría bien que se lo leyeran. Lo dice un santo.
¿No es este el hijo del carpintero?
La respuesta del Señor Jesucristo: Convenía que me ocupara de las cosas de mi Padre, no indica que la paternidad de Dios excluya la de José. Ellos eran padres en el tiempo; Dios lo era desde la eternidad. Ellos eran padres del Hijo del hombre, el Padre lo era de la Palabra y Sabiduría, era Padre de su Poder, por quien hizo todas las cosas. Ya he hablado bastante sobre por qué no debe preocupar que las generaciones se cuenten por la línea de José y no por la de María: igual que ella fue madre sin concupiscencia carnal, así también él fue padre sin unión carnal. No lo apartemos porque careció de concupiscencia carnal. Que su mayor pureza reafirme su paternidad, no sea que la misma santa María nos lo reproche. Ella no quiso anteponer su nombre al de su marido, sino que dijo: Tu padre y yo, angustiados, te estábamos buscando.
Si decimos que José no es su padre porque no lo engendró por medio de su carne, él replicará: «¿Acaso María le dio a luz por obra de la suya?» Lo que obró el Espíritu Santo, lo obró para los dos. Siendo un hombre justo, dice el evangelista Mateo: justo era el varón; justa, la mujer. El Espíritu Santo, que reposaba en la justicia de ambos, dio el hijo a ambos.
San Agustín
Historietas de aquí y de allá 
San José no solo fue padre auténtico por haber educado, enseñado, etc., a Jesús, sino que el propio S. Agustín, comentando el hecho de que María llevó a Jesús en su mente y en su cuerpo, añade: «Es más importante lo que está en la mente que lo que se lleva en el seno». María llevó a Jesús en su mente y en su cuerpo, José lo llevó en la mente. Por razones de ese jaez, tengo entendido que S. Agustín llegó a decir que S. José no solo era padre, sino que era más padre de Jesús de lo que lo son de sus hijos los padres de la tierra.
Yo me hago una pregunta: José, que sin duda se casó con palabra de respetar la virginidad de María, pudo un buen día no respetarla. Pero Dios necesitaba la virginidad de María como un espacio a través del cual laborar en la Virgen. El Hijo del hombre tenía que nacer de una virgen. ¿Y bien? José respetó en todo momento la virginidad. Jesús es hijo de dos virginidades, porque si se hubiese quebrado una, obviamente sería quebrándose las dos.
José, en las fuentes de la salvación, absteniéndose de trato marital, de dinero, incluso del habla -porque no aparece una sola palabra suya-.
En mi opinión, la ponderación agustiniana se queda corta: no es el mejor padre; es «la sombra del Padre», como lo llamó San Juan XXIII.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Muy interesante lo que cuentas de San José. Creo que tienes razón.
Una maravilla lo de San Juan XXIII: la sombra del Padre.
Muchas gracias.
Me gustaLe gusta a 1 persona