San Juan, Juanito, un pelota…

Resulta que ayer como era el Evangelio de Santiago y Juan, puse en facebook esto:

Hoy el Evangelio va de Santiago y Juan. Me hace gracia lo finolis que pintan a San Juan, cuando en realidad llamaban a los hermanos «los hijos del Trueno», dicen que por su temperamento. Parece que lo pintan así para demostrar el amor que le tenía a Jesús, que una cosa no quita la otra.
Esas pinturas tan finolis son las que toman como guía en libros y películas tipo «Código da Vinci» y demás…
Y como tengo por aquí curas-amigos, si me equivoco que me lo digan.

Bueno, pues vino a iluminarme un cura, José Manuel. Y nos estuvo contando (digo «nos» porque también estaba Elisa por allí) que Jesús lo querría por ser el más joven, no por ser manso, porque de manso no tenía nada: «Señor, ¿quieres que mandemos bajar fuego del cielo que acabe con ellos?».

Que sería trepador como cierto futbolista, un pelota de cuidado. Eso sí que se ve en el Evangelio de ayer.

Que tenía además enchufe: cuando Jesús estaba preso, él era conocido del Sumo Sacerdote, se codeaba con las altas esferas, entró en el palacio tranquilamente, habló con la portera e hizo entrar a Simón.

Nos ha dicho que la posición de Juan en la mesa al lado de Jesús no es necesariamente por afecto. Parece ser que en la cena pascual judía daban la última copa de vino al más joven de la familia para que saliera a la puerta a ver si había aparecido Elías, y si no estaba a la puerta se echaba el vino al suelo y hasta el año que viene. Así que probablemente Juan estuviera al lado de Jesús por ese motivo.

Que si ahora es santo es porque hizo méritos, porque antes debía ser de cuidado y así la transformación tuvo más mérito.

Esto es un resumen de lo que nos ha dicho porque había mucho más.

La verdad es que he disfrutado con todo lo que nos ha contado, como dice él echándole imaginación. Nunca  hubiera pensado que San Juan podría ser así.

 

30 pensamientos en “San Juan, Juanito, un pelota…

  1. No soy de ninguna religión, pero me he leído los libros de todas ellas, y a todas respeto. Pero no deja de ser un libro por partes impresionante y por partes ciencia ficción ya que hay muy poco demostrado y casi todo son conjeturas, pero también digo que si a alguien le hace bien y escucharlo o leerlo le gusta y le da paz pues que mejor, la vida es un episodio y si no molestas a nadie con lo que te gusta, vívelo y siéntete bien con ello.

    Le gusta a 1 persona

  2. Me gusta mucho esta entrada, porque pone de manifiesto que los santos no son personas perfectas; de hecho, son humanos igual que cualquiera y, como tales, han tenido y tienen sus defectos. A pesar de todo, cumplen el plan divino.

    En cuanto a la Biblia, considero un error leerla con otros ojos que los de la fe o, en su defecto, la curiosidad y la inocencia. Si se quiere encontrar algo en ella que viene dictado por prejuicios, sin duda lo encontraremos, pero eso no quiere decir que esté ahí. Muchas veces vemos sólo lo que queremos ver.

    Le gusta a 1 persona

    • Pues sí, Leire, la verdad es que es un alivio cuando ves como eran y cómo cambió su vida, dejándose amar por el Señor. Así, los demás también tenemos posibilidades. Hay que aprovecharlas.

      Y lo de la Biblia también es mejor leer las que tienen unos buenos comentarios de quienes la han desmenuzado para ayudarnos a entenderla.

      Me gusta

  3. Me divertí mucho con esto. Yo algo de lo del vino sabía. Hay un libro que yo escuché comentar, es de Scott Hann, algo de «La cuarta copa», donde Scott cuenta todo lo del ritual judio de las cuatro copas de vino que se beben o no durante la cena. Es muy interesante porque lo va cotejando con los hechos de la ultima cena y porq ué Jesus hacia ciertas cosas que hoy nos quedan como incomprensibles, pero que vistas desde lo que es el ritual se comprenden perfectamente. Yo no se si estará contenido dentro de la Cena del Cordero o si será un libro independiente. Voy a ver si me pongo y lo busco.

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario